Es común la idea de que en cada comienzo partimos de cero y tenemos las baterías llenas; sin embargo, llevamos arrastrando cierto agotamiento y, hagamos lo que hagamos, la sensación es la misma: cansancio.
Antes de meterte algo o cambiar drásticamente tu rutina, nuestro consejo es que vayas al médico si sientes el cansancio te excede. Después de descartar en el consultorio cualquier condición anómala, tenemos 5 recomendaciones que puedes aplicar en tu vida diaria para impulsar tus niveles de energía.
- Aprende a dosificarte
Nuestro estilo de vida y ganas de más (léase capitalismo y culto a la productividad) nos hace sobrecargarnos de actividades, y nuestro agotamiento comienza en la mente desde que pretendemos organizarnos para tantas actividades.
Después sigue el enorme esfuerzo de tratar de ejecutar todas las tareas en el menor tiempo posible, pero eso puede ser contraproducente y, de hecho, reduce tus niveles de energía debido al estrés que todo esto te genera.
CONSEJO: El secreto está no sólo en dividir las tareas sino en espaciarlas a lo largo del día y, si se puede, de la semana y, lo más importante, aprende a frenarte y a reconocer que no lo tienes que lograr todo. Distribuye tus tareas para que puedas hacer en la mañana, en la tarde y en la noche, sin olvidar tomar descansos y comer entre cada una de ellas
- Hacer ejercicio y tomar una siesta
Aunque pudiesen estar en los extremos del espectro, ejercitarse o tomarse una siesta puede tener efectos mágicos en tus niveles de energía.
Quizás estás pensando que lo último que te provoca hacer cuando estás cansado es ejercicios. ¡Claro! Estás agotado. Pero el ejercicio regular te hará sentir menos cansado a largo plazo y eso te hará tener más energía.
CONSEJO: Toma un receso en el trabajo o en tus estudios y sal a caminar por la cuadra. No hay nada más reconfortante para el cuerpo y la mente que una siesta corta, de unos 20 o 30 minutos, cuando estás agotado. OJO, si tienes insomnio las siestas pueden empeorarlo
- Ponte las pilas con los suplementos
En el mercado hay una gran variedad de suplementos que prometen elevar tus niveles de energía, incluso algunos se autodenominan “antienvejecimiento”.
Antes de tomar cualquier tipo de suplemento, lo más recomendable es que consultes a tu médico si realmente lo necesitas.
CONSEJO: Se pueden obtener todas las vitaminas y minerales necesarios en una dieta saludable y balanceada
- No caigas en la trampa del dulce
Siempre que sentimos el bajón se nos antoja algo dulce (un pan y una coquita); aunque el azúcar no es la mejor solución para subir tus niveles de energía.
Sé sabia a la hora de decidir qué combustible te suministras. Un pancito azucarado te dará muchas calorías; sin embargo, tu cuerpo tenderá a metabolizarlas rápidamente y puedes terminar sumergiendo azúcar en la sangre y con fatiga.
CONSEJO: Come en horarios regulares y así te será más fácil mantener tus niveles de energía. Intenta consumir tres comidas al día. Si es necesario, come entre comidas un snack o refrigerio saludable, como una fruta o un yogurt bajo en calorías
- Cuidado con la cafeína
Con la cafeína pasa lo mismo que con las golosinas azucaradas y, de hecho, muchas de nosotras sentimos que no podemos comenzar bien el día sin una taza de café.
El Colegio Real de Psiquiatras (Royal College of Psychiatrists) recomienda que cualquier persona que se sienta cansada elimine la cafeína.
CONSEJO: A veces nos sentimos cansadas simplemente porque estamos ligeramente deshidratadas, así que toma agua